Gastón
Cuenta Susana: ''Un día ví un gatito hermoso, blanco, con ojos azules, me enamoré de él a primera vista, pensé en protejerlo y él me daría el cariño y ronroneo que yo buscaba. Una vez en casa me sentí muy frustrada ya que no era como lo había soñado, no nos entendíamos y cuando me acercaba se asustaba o cuando yo estaba distraida me mordía. Pensé dejarlo en Hogar Felino pero me aconsejaron al ver mi tristeza que consulte a la veterinaria de su confianza ('Veterinaria del parque', 4923-7555, luz_vet@yahoo.com.ar) Allí me atendió con una hermosa sonrisa María Luz, que me tranquilizó y me explicó que 'Gastoncito' (así se llama mi mascota) es sordo y por eso no nos entendíamos. Con unas pocas indicaciones todo cambió:
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Evitar sorprenderle mientras duerme, no solo puede reaccionar agresivamente por miedo, sino que puede crearle una situación de angustia y ansiedad.
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Para comunicarse con él, golpear el suelo o dar palmas sobre el soporte donde esté sentado para que a través de las vibraciones oiga el llamado.
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Tener en cuenta que puede llegar a interpretar los gestos a señas para que sepa lo que se quiere de él.
Por el contrario el mundo exterior está lleno de peligros. No podemos olvidar que no escuchará a los cohces acercarse, no oirá a los perros ni a los niños, lo cual lo pone en peligro continuo.
Para asegurar su seguridad no puede salir suelto por la calle, ni por los patios, se debe quedar en casa.
Después de estos consejos decidimos castrarlo para que no tenga más mininos sordos y en poco tiempo encontramos la comunicación. En este momento estoy felíz con Gastoncito. Él me da sus cariños y compañía y yo la protección que necesita. Hoy nos acompañamos y nos necesitamos felizmente gracias a los consejos de Hogar Felino y a María Luz lo logré.''